Ciudad
Blanca a la que siempre se vuelven
Fundación.-
28 de septiembre de 1606, Cristóbal de Troya
Independencia.-
17 de julio de 1823
Ubicación:
Región Sierra
Altitud.-
2.228 m.s.n.m
Temperatura.-
Oscila entre 12° y los 32
Ibarra
es la capital de la provincia de Imbabura. Ibarra es la ciudad donde el turista
encuentra belleza en su paisaje y naturaleza que le rodea. La ciudad tiene una
altitud de 2225 metros sobre el nivel del mar y es conocida como la Ciudad
Blanca. Ibarra aún conserva su sabor de antaño, cada rincón guarda recuerdos
del pasado que se proyectan al presente y donde armoniosamente se combina lo
colonial con lo moderno. Ibarra es cuna de varios hombres forjadores de la historia de la
nacionalidad ecuatoriana.
Ibarra
en el año de 1606 fue fundada por capitán Cristóbal de Troya y Pinque y el 2 de
noviembre de 1829 fue reconocida por el libertador Simón Bolívar como capital
de la provincia de Imbabura.
Ibarra
tiene un pasado lleno de historia rica y los aspectos de una ciudad que se
desarrolla; crece y hacen de ella ideal para aprender las experiencias del
pasado.
La
gastronomía es otro de los aspectos que caracterizan a Ibarra, existen un sin
número de sitios donde propios y extraños pueden degustar los más sabrosos
platos típicos como empanadas de morocho, fritadas, tortillas con chorizo entre
otros y para el postre están los deliciosos helados de paila, el arrope de
mora, las nogadas que por su sabor es imposible dejar de consumirlos.
El
visitante puede llegar a Ibarra seguro de encontrar una ciudad hospitalaria. En
el Valle de Ibarra parece haberse perennizado la primavera, su clima veraniego,
sus verdes y extensos campos la convierten en un Oasis Natural.
Turismo
Iglesia Nuestra Señora de la Merced
La
Iglesia Nuestra Señora de la Merced, está ubicada junto al parque Víctor Manuel
Peñaherrera (Parque La Merced) fue construida con piedra labrada a comienzos
del siglo XIX, de estilo romano monumental donde se conservan muestras
pictóricas de santos y vírgenes, cuadros recordatorios de la reconstrucción de
la ciudad. Su altar mayor es tallado en madera y recubierto de pan de oro. Es una importante muestra arquitectónica,
construida con piedra labrada, de estilo barroco y su fachada de influencia
manierista, luce en sus torres la imagen de la Virgen de las Mercedes, patrona
y generala del Ejército Ecuatoriano.
Se
ubica en el Parque Abdón Calderón. Su construcción se remonta al siglo XVII, en
el año de 1873 y avanzó hasta 1878 donde se la reconstruyó a causa del
terremoto de 1868. Treinta años más tarde, año de 1935 se concluyó la obra. Es
de una sola nave, después del terremoto de 1868 fue la única iglesia que
mantuvo en pie sus paredes Arquitectónicamente conserva el estilo tradicional
sobre todo la línea recta, su fachada es de formas mixtas sencillas, de estilo
costumbrista propia del siglo XIX. Sus torres tienen hornacinas y culminan en
pirámides agujales, la fachada es de piedra labrada de las canteras del
Tahuando. Al interior en el altar mayor se venera la imagen de nuestra señora
de la Consolación patrona de la orden de San Agustín.
Iglesia Santo Domingo
La
Iglesia Santo Domingo está ubicada en la plazoleta Boyacá, data del tiempo de
la fundación de Ibarra, posee una hermosa fachada de piedra y en su altar mayor
se venera a la Virgen del Rosario, además exhibe una gran variedad de obras
pictóricas y esculturas de extraordinario valor artístico de la época,
enmarcadas con hermosos retablos de madera.
Esta
iglesia está ubicada en el Parque Pedro Moncayo de la ciudad, es una
edificación construida en piedra, que se distingue por su estilo romano que
cuenta con valiosas obras de arte de la Escuela Quiteña, retablos y altares
tallados en madera fina y recubierta con pan de oro. La catedral tiene
características románticas o eclécticas, distinguiéndose la influencia
neo-barroca en su diseño y funcionalidad. En el año de 1606, era una iglesia
primitiva, de adobe y paja, que fue reemplazada en 1672 por una construcción
grande de cal y piedra labrada, destruida por el terremoto de 1868. Monseñor
Tomás Iturralde, obispo de Ibarra, emprendió la tarea de reconstruir el templo
a partir de 1872 gracias al apoyo de Gabriel García Moreno Jefe Civil y Militar
de la provincia.
Basílica la Dolorosa
Basílica la Dolorosa
Esta
iglesia es de estilo neo romano y 25 años de construcción, posee dos enormes
torres y colosales campanarios, su altar mayor es tallado en madera de cedro,
donde se venera el cuadro de la Virgen Dolorosa. Fue reconstruida luego del
terremoto de 1.987 y consta de una sola nave con cielo raso en forma de
artesón, está ubicada en la parroquia de San Francisco, en la calle Sucre y Liborio
Madera. A su alrededor podemos encontrar varios edificios modernos con oficinas gubernamentales.
Parque La Merced
Parque La Merced
Este parque se encuentra ubicado frente a la
Iglesia La Merced con espacios verdes y majestuosos árboles que te ofrecen un
momento de descanso. A un lado del parque están ubicados espacios de venta de
los tradicionales dulces ibarreños como las nogadas y el arrope de mora. El
parque posee tres nombres, Víctor Manuel Peña Herrera debido al monumento
ubicado en el centro del parque, 9 de Octubre y el más conocido en la
actualidad como La Merced.
Ubicado en el corazón de Ibarra en el cual se destacan árboles y hermosos jardines diseñados y mantenidos. Rodeado de la Iglesia de la Catedral, Capilla Episcopal, El Torreón, los edificios de la Gobernación y el Palacio Municipal. En su centro está la estatua del notable ibarreño Dr. Pedro Moncayo como homenaje de la República del Ecuador
Obelisco
El
Obelisco es un monolito levantado en el centro de la plaza "Alejandro Pasquel
Monge" de Ibarra, junto a la estación renovada del ferrocarril
Ibarra-Salinas. Su construcción data del año 1949. Encontramos dos esculturas de Don Miguel de Ibarra y del
Capitán Cristóbal de Troya fueron esculpidas al bronce por el profesor José
María Ayabaca, profesor de artes del
colegio Daniel Reyes de San Antonio de Ibarra, quien realizó estudios sobre las
biografías de los 2 hombres ilustres de Ibarra. La
inauguración del Obelisco fue un 28 de septiembre de 1951. El Presidente José
María Velasco Ibarra en su visita a Ibarra un 28 de septiembre de 1960, señaló
que “Ibarra es una ciudad señorial y digna, más noble ahora con la construcción
de su obelisco que como atalaya, es fiel testigo del pasado que se refleja
glorioso en su presente y se magnificará en el futuro...". El Obelisco de
Ibarra es un ícono del orgullo de la ciudad, porque es una de las obras más
representativas de Ibarra, ya que representa la identidad de sus habitantes.
Gran
monumento construido en honor a San Miguel Arcángel, patrono de la ciudad de
Ibarra, es un mirador ubicado a 3 1/2 km. de la ciudad, donde usted puede
disfrutar de una maravillosa vista de la Laguna de Yahuarcocha y de toda la
ciudad. Este sitio es un mirador natural desde donde se tiene una excelente
vista de la ciudad de Ibarra y sus alrededores como San Antonio de Ibarra, La
Esperanza, lomas de Azaya, Loma de Guayabillas, Yuracruz y elevaciones como el
Imbabura, Cubilche, Curro, Cotacachi, entre otras.
Piedra Chapetona
Está en las orillas del Tahuando. Luego de luchar en
las calles de Ibarra, el ejército independentista liderado por Bolívar
arrinconó hasta este sector oriental de la ciudad, por donde cruza el río
Tahuando, al grupo pro español dirigido por Agustín Agualongo. Cruzando el río
hacia el este, Bolívar derrotó finalmente a los realistas en el sector
denominado hasta hoy como "La Victoria". La leyenda dice que al
cruzar el río, desde esta enorme roca Simón Bolívar dirigió a sus tropas para alcanzar la victoria sobre
los realistas, apodados "chapetones" en esa época.
Ibarra es una ciudad con dulces y bocaditos únicos en
la región, si de delicias se trata Ibarra ofrece las deliciosas y muy conocidas
nogadas y el arrope de mora, que constituyen las golosinas apetecidas a
nivel nacional por su auténtico sabor. Muchas mujeres ibarreñas conservan esta
dulce tradición que constituye un atractivo para propios y extraños.
Son
tradicionales los helados de paila, los cuales se preparan en pailas de bronce
que se disponen sobre una cama de hielo con sal, envuelta en paja. Estos
helados fueron inventados por Rosalía Suárez, alrededor de 1896, y es
tradicional degustarlos en la heladería que lleva su nombre, ubicada en el
centro de la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario